El sindicato condena la represión emprendida contra trabajadores en lucha y activistas de los movimientos sociales.
La Confederación General del Trabajo (CGT) se dirige al conjunto de los medios y agencias de información para dar a conocer su posición sobre la creciente ola represiva que desde el Gobierno y sus instituciones se ha desatado contra sectores en lucha de la clase trabajadora y sobre el activismo de los movimientos sociales.
A mediados de esta semana, precisamente, se cumple el plazo de diez días laborales dado por la Audiencia Nacional para que ocho jóvenes catalanes se presenten de forma voluntaria para su ingreso en prisión. Allí cumplirán la pena de tres años de privación de libertad por un «delito contra las altas instituciones del Estado» impuesta por el Tribunal Supremo. Tal delito consistió en participar en la acción popular Aturem el Parlament, el 15 de junio de 2011, cuando los diputados catalanes aprobaron unos presupuestos con importantes recortes en gasto social.
La CGT quiere recalcar que tal acción de protesta tuvo un carácter pacífico, por lo que ni los parlamentarios ni las instalaciones de las Cortes Catalanas sufrieron daño alguno, más allá de tener que soportar los gritos y acusaciones a sus señorías por someter a las clases más humildes a todo tipo de recortes sociales y laborales, aplicando dócilmente las políticas impuestas por la Troika. Como consecuencia del carácter no violento de la protesta Aturem el Parlament estas ocho personas, detenidas por los Mossos junto a otra docena de activistas sociales que protestaban a la entrada de los parlamentarios, fueron absueltas de los graves delitos atribuidos.
Sin embargo, el 17 de marzo de 2015, el Tribunal Supremo revocó la absolución de la Audiencia Nacional que los había declarado inocentes en julio de 2014, mediante una sentencia que cuestionaba la aplicación del tipo delictivo «contra las altas instituciones del Estado» que se les imputaba. Ahora, un mes después, se enfrentan a la inminente entrada en prisión por la nueva sentencia, contra la que sus abogados ya han presentado recurso de nulidad a la decisión de la Audiencia Nacional y lo elevarán también al Constitucional. Estando también aún pendiente de resolver el que recurso que presentaron ante el Tribunal Supremo.
La CGT ha apoyado y participado en las acciones de protesta que se han desarrollado recientemente en Barcelona y otras ciudades (como Madrid o Valencia) para mostrar la solidaridad con las víctimas de esta injusticia y exigir la anulación de una condena mucho más dura que las que se están aplicando a personajes que han saqueado los recursos públicos o son responsables políticos de graves negligencias que han causado cuantiosos daños y hasta víctimas mortales.
Desde los sindicatos de la Confederación se continuará colaborando en las recogidas de firmas, manifestaciones y demás actos públicos encaminados a exigir la libertad de los 8 de Aturem el Parlament, como se ha hecho hasta ahora, por considerar que estas condenas y toda la represión dirigida contra los movimientos sociales, y muy especialmente contra los colectivos libertarios, son el instrumento del sistema capitalista para intentar acallar las luchas que surgen, cada vez con más rabia, contra la pérdida de muchos derechos conquistados en el pasado, que ahora son el objetivo de quienes nos exprimen para ser cada vez más ricos y poderosos.